Aromaterapia y la energía de los chakras

Por Ximena López Lara
Aplica aceite esencial Young Living en carótidas

Extracto de El Gran Libro de los Chakras de Shalila Shar&dom y Bodo J. Baginski

Todas las plantas, los animales y las personas tienen su propio olor aún cuando a veces solo puedan percibirlo y diferenciarlo quienes poseen un olfato muy refinado.

En el olor se manifiesta su personalidad, su peculiaridad y también su estado de salud o de enfermedad. Los olores agradables siempre están asociados con el bienestar, armonía y alegría de vivir.

Esto también ocurre a las personas que cuidan su cuerpo a través de la alimentación y la meditación.

En cuanto un olor agradable nos llega a la nariz inspiramos de forma automática y más profundamente. 

Así inundamos nuestros pulmones de ese aire vivificador lleno de aromas y nos sentimos estimulados y activados. 

Ante un olor desagradable contenemos también de forma automática la respiración. Sentimos que al respirar introducimos en nosotros algo enfermo, desagradable.

Sin embargo, percibir algo agradable o desagradable también tiene que ver con nuestra evolución y de nuestra forma de vida.

Las esencias de las plantas, cada una con su propio mensaje, aguardan a poder servir al hombre con sus colores, sus sustancias activas y sus aromas, contribuyendo así a aportar a los tiempo futuros más armonía, salud, alegría de vivir y mayor conciencia.

Dado que las plantas hunden sus raíces en la tierra y sus hojas y flores se dirigen hacia la luz, reciben el alimento tanto de la energía del cielo como de la tierra, haciendo surgir de ellas belleza, color y aroma y transmitiendo todo esto a nosotros, los seres humanos.

En sus esencias aromáticas, las plantas conservan su sustancia más íntima en estado de pureza intacta, para dejarla fluir generosamente en un momento dado. Su fragante alma se une con nuestras fuerzas espirituales y desencadena en nosotros procesos de transformación.

Investigaciones indican que mediante los olores, se desencadenan las impresiones sensoriales más fuertes, y que las esencias aromáticas influyen directamente sobre nuestra actitud mental.

El sentido del olfato es la función sensorial que más intensamente está ligada a las informaciones almacenadas en nuestro subconsciente.

Las fuerzas anímicas, etéricas y sutiles de las plantas afectan nuestro cuerpo energético y sutil, en el que se asientan los chakras, y despliegan en él su efecto curativo y armonizador.

Para la aromaterapia aplicada a los chakras, se deben utilizar Aceites Esenciales 100% puros y  de grado terapéutico. Los aromas fabricados artificialmente carecen de la fuerza activadora de las plantas, al igual que carecen de la compleja e intrincada variedad de sustancias activas que solo pueden originarse en al jardín de la madre naturaleza.

Cómo estos aceites esenciales son sustancias orgánicas naturales, su efecto está en consonancia con las necesidades del cuerpo y del alma.